El francés de Hyundai encabeza la clasificación de la cita sudamericana con un colchón de 4.1″ sobre Kalle Rovanperä. Sami Pajari completa el podio provisional justo delante de Thierry Neuville. El ocho veces campeón del mundo, a pesar de llevarse el tramo más largo de la mañana, va en P7. Daños en un neumático le alejan de la lucha por el triunfo.

Adrien Fourmaux manda en el 2º Rally del Paraguay. El piloto francés llega a la asistencia de mediodía a con una ventaja de 4.1″ sobre Kalle Rovanperä. A los mandos de su Hyundai i20 N Rally1, el francés está mostrando esa consistencia de la que tanto ha carecido en pruebas anteriores. Pero, a pesar de las buenas sensaciones, el #8 no lanza las campanas al vuelo. Y tiene razones para ello. Suecia, Portugal, Italia… memorias que le hacen mantener la calma.

El galo es consciente de todo el camino que falta por recorrer en tierras paraguayas. Apenas se han celebrado cuatro tramos. Restan quince más. Lo que necesita, no caer en errores del pasado. Seguir adelante con la cabeza fría y sin excitarse demasiado. Por detrás, el ganador del ‘1000 Lagos’ le vigila de cerca. Aunque no se ha sentido excesivamente cómodo con los duros rasantes de esta nuevo evento mundialista, el #69 precede a sus tres rivales directos.

Sami Pajari completa el podio provisional. El júnior de Toyota marcha a 13.9″ de la segunda posición y, a su vez, endosa solo 0.4″ a su inmediato perseguidor, Thierry Neuville. El actual campeón del FIA World Rally Championship (WRC) inició la jornada con un registro más que discreto en la especial de apertura. Un violento aterrizaje le invitó a reducir el ritmo. Lo bajó más de la cuenta y eso le costó 14.3″ con el autor del scratch, brecha con la que ahora lidia.

Elfyn Evans, menos penalizado que en otras ocasiones por las labores de limpieza, figura en la quinta posición a 1.3″ de las plazas de podio. El galés aún siente que no extrae el máximo rendimiento de su Toyota. No acaba de coger el truco a eso de abrir carretera. A su espalda, Ott Tänak anda asombrado con las prestaciones de su Hyundai. Y no para bien. «Es como ir con un coche roto», dijo al término del TC-4. Una excursión por el campo tampoco le ayudó.

Séptimo aparece un Sébastien Ogier obligado a remontar. El de Gap sufrió un pinchazo en el TC-2, percance que le ocasionó una pérdida de 37.3″. Lo de quedarse sin goma de repuesto en el maletero no entró en su cabeza. El #17 atacó con total convicción en la cronometrada posterior, la más larga, y recuperó parte importante del tiempo cedido. Josh McErlean y su Ford Puma Rally1 están en P8, mientras Takamoto Katsuta, que también pinchó, es noveno.

En WRC2, Diego Domínguez defiende el honor de los aficionados locales con el primer lugar que ocupa en la tabla. El del Toyota GR Yaris Rally2, acompañado por Rogelio Peñate, lidera por delante de los candidatos al título de la división de plata. Yohan Rossel, segundo, rueda a 11.0″ del ídolo paraguayo. Otro representante de este nación, Fabrizio Zaldívar, es tercero. Oliver Solberg, víctima de otro pinchazo, ha de ingeniárselas para salir de su décimo puesto.

En WRC3, Matteo Fontana comanda la clasificación. El transalpino del Ford Fiesta Rally3 ha aprovechado el abandono de Nataniel Bruun para heredar la batuta de mando de la división de bronce. El boliviano disponía de una renta de 5.0″ respecto al italiano cuando una avería le abocó a la retirada en la cronometrada de ‘Yerbateras’. El segundo puesto está en manos del galo Ghjuvanni Rossi, toda vez que el tercero es propiedad del peruano Eduardo Castro.

Foto: Hyundai Motorsport