El ocho veces campeón del Mundial y el estonio de Hyundai empatan a la décima en la superespecial de apertura de la séptima cita del FIA World Rally Championship (WRC). El tramo comienza con hora y media de retraso debido a unas retenciones en la sección de enlace. Takamoto Katsuta ocupa la tercera plaza. El mejor Ford, el de Martins Sesks.
Sébastien Ogier y Ott Tänak realizan una conquista compartida de la ciudad de Atenas. Ante miles de aficionados y en pleno corazón de la capital helena, el francés y el estonio clavaron sus respectivas banderas. Ellos dos son los primeros líderes de este 69º Acrópolis Rally tras un empate a la décima en el tramo de apertura. Ambos completaron los 1.50 kilómetros del recorrido con un tiempo de 1:18.1, y eso que usaron unos estilos de pilotaje muy diferentes.
Aunque el inicio de la prueba griega estaba previsto para las 18:05 hora local, unos atascos dantescos en el enlace entre Lamia y la ciudad de los dioses motivaron que se comienzo se retrasase hasta las 19:28 horas. La congestión del tráfico fue ocasionada por accidentes en los que ningún participante se vio involucrado. De hecho, el traslado de una localidad a otra lo hicieron los pilotos y los coches por separado. Estos últimos llegaron mediante camiones.
A pesar de tratarse de una cronometrada destinada al espectáculo, el ocho veces campeón del mundo no se dejó nada en el tintero. Apostó por una conducción agresiva y apuró hasta el último milímetro de superficie disponible. Tanto que perdió el retrovisor del lado derecho del su Toyota. El tripulante del Hyundai #8, por su parte, fue más limpio en sus maniobras a bordo del i20 N Rally1, un artefacto que todavía persigue su primera victoria de la campaña.
El tercer lugar provisional está en las manos de Takamoto Katsuta, que cedió apenas nueve décimas con sus predecesores. El piloto japonés, liberado por cuarto evento consecutivo de la presión de puntuar para el apartado de fabricantes, espera un fin de semana «con mucho drama»… e intentará mantenerse ajeno a él. Adrien Fourmaux, cuarto, utilizará una filosofía similar. El galo necesita, más que nunca, un fin de semana sin errores para alejar fantasmas.
Thierry Neuville tiene su Hyundai en la quinta plaza, mientras Elfyn Evans y Kalle Rovanperä comparten la sexta con sendas unidades del Toyota GR Yaris Rally1. Al galés, que repite con la responsabilidad de abrir carretera, asume que deberá de atacar en la jornada de mañana, aunque sin olvidarse de la gestión de la mecánica. Martins Sesks es el mejor representante del M-Sport Ford desde su octavo puesto. El top diez lo cierran Sami Pajari y Josh McErlean.
En WRC2, la batuta de mando está en poder de Oliver Solberg. El sueco del Toyota GR Yaris Rally2, que figura por delante de los Puma Rally1 de Grégoire Munster y Jourdan Serderidis en la general, aventaja en su categoría por dos décimas a Robert Virves. El estonio de Škoda endosa, a su vez, otros 0.2″ a Yohan Rossel, que es tercer con su Citroën C3 Rally2 oficial. El bando español lo comanda Alejandro Cachón con su Toyota GR Yaris Rally2 en cuarta plaza.
Dentro de WRC3, los equipos que también están pujando por las posiciones de privilegio en el Júnior WRC son los que han tomado la delantera. Ese grupo lo lidera Ali Türkkan. El turco dispone de un colchón de tres décimas de segundo sobre Diego Domínguez Júnior. Tercero aparece el vencedor del Shakedown, Taylor Gill. Por lo que respecta a los pilotos locales, el mejor situado es Efthymios Chalkias, que está sexto a los mandos de su Renault Clio Rally3.
En la división reservada a las estrellas del futuro, las dos primeras plazas de la clasificación también las ocupan Türkkan y Domínguez separados por ese estrecho margen de 0.3″. Pero el tercer lugar es del irlandés Eamonn Kelly, que se dejó 0.6″ con el deportista paraguayo. El océanico Gill, líder del certamen tras sus victorias en Suecia y Portugal, anda cuarto. Su rival directo, Mille Johansson, está octavo detrás de Kerem Kazaz, Thomas Martens y Max Smart.

Foto: Toyota Gazoo Racing WRT


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