Los lanzaroteños participaron el pasado fin de semana en su primera cita juntos dentro de la modalidad de rallies. Compartiendo el habitáculo del Citroën C3 Rally2, acabaron segundos de la clasificación general. «Nos hemos acoplado muy bien. Controla el tema de las notas y el de los tiempos a la perfección», relata el piloto de la provincia oriental.

Óscar y Nerea Cabrera, padre e hija, realizaron el pasado fin de semana su primer evento de la modalidad de rallies juntos. Después de compartir habitáculo en varios rallysprint, ambos emprendieron un nuevo desafío en el 45º Rallye Isla de Lanzarote. Y el piloto del Citroën C3 Rally2 acabó «gratamente sorprendido» con el desempeño de su discípula en el asiento de la derecha. La alegría para ellos quedó redondeada con la segunda posición que alcanzaron.

«Nos hemos acoplado muy bien dentro del coche», asevera Óscar. El deportista lanzaroteño relata que su descendiente controla «perfectamente el tema de las notas y los tiempos». A pesar de que «todavía hay labores que le quedan por aprender», el progenitor confía en que avanza «en el buen camino». «Estoy muy contento y satisfecho con su trabajo», agrega. Y es que Nerea tan solo cuenta en su currículum con tres apariciones competitivas desde 2022.

Cabrera admite que comenzó la última prueba del Campeonato de Canarias de Rallies sobre Asfalto (CCRA) «un tanto nervioso» por diferentes razones: «Salía con mi hija, de noche, por un tramo nuevo…». Su planteamiento para esa fase nocturna del ‘Isla’, el de «no dormirse». «No había que correr al máximo, pero no te podías dormir porque había gente que sí estaba corriendo mucho», detalla. El sábado, en zona más conocida para él, fue «más controlado».

La campaña de Óscar arrancó con dos victorias seguidas en los rallysprint de La Candelaria y Arucas, pero sufrió un duro revés con el conato de incendio que la unidad de su propiedad lamentó en el ‘Isla de Gran Canaria’. «Esa es la parte negativa del año, la que alteró un poco los planes que habíamos trazado», expone Cabrera. La reparación del coche está avanzada. Lo único que falta por completar es el motor, a la espera de que le monten las evoluciones.

Foto: Óscar Quintana