El piloto grancanario termina la primera prueba de su trayectoria en el mundo real con un subcampeonato en el certamen promocional de Cataluña. Junto a Isaac Pujol, sufre un accidente en el 63º Rallye 2000 Viratges que trunca sus posibilidades de luchar por el entorchado. Antes del momento del abandono, el canario rodaba en la tercera plaza.

Una salida de carretera frustra las opciones de Kilian Santana al título del 46º Volant RACC. El piloto grancanario se lo jugaba todo en el 63º Rallye 2000 Viratges. Al volante de un Opel Corsa 1.2T VR, el representante del Archipiélago estaba obligado a ganar y esperar sucesos. Lo intentó, pero su accidente en la tercera especial terminó por descartarle de la batalla por una corona que se marcha para las vitrinas de los locales Jordi San Andrés y Carlos Cabrera.

Santana arribaba a la cita con base en la localidad barcelonesa de Artés en el segundo lugar del campeonato convocado por el RACC. La constancia, su mejor baza en una campaña que ha completado por unas carreteras muy poco parecidas a las de Canarias. Acumulaba cinco podios, pero esta vez solo le valía el triunfo. Fue a por él y cometió su único error del curso, el que le abocó a la retirada y su consiguiente cero. Eso sí, no se quedó sin subcampeonato.

El evento organizado por el Biela Club Manresa constaba de dieciséis especiales. La primera fue neutralizada. En la siguiente, Santana estableció el segundo mejor tiempo. Sin embargo, en la general figuraba tercero tras haber recibido una sanción de diez segundos. El de la isla de Gran Canaria trató de recuperar ese terreno en el TC3, el de ‘Castelladral’. Pero no llegó a la bandera de meta de ese tramo, despidiéndose así de cualquier posibilidad de campeonar.

Santana firmó en su temporada de debut en el mundo real cuatro segundas posiciones y un triunfo, el que consiguió a principios del mes de septiembre en el 5º Memorial Abel Puig. El canario demostró en sus participaciones, tanto en tierra como en asfalto, el ritmo necesario para pelear por las plazas de privilegio. A pesar de competir en un territorio que no conocía tan al detalle, Kilian fue capaz de plantear una férrea oposición a los deportistas catalanes.

Foto: Volant RACC