El piloto majorero, acompañado por Rubén Pérez, domina los compases iniciales de la penúltima cita del Campeonato de Canarias de Tierra. A los mandos de su Škoda Fabia R5, encadena una victoria parcial tras otra hasta labrarse un liderato de 24.8″ con Juan Carlos Quintana y Jonathan Hernández. Terceros están Daniel Guerra y Gabriel Espino.

Borja Pérez y Rubén Pérez firman un pleno de scratch en la primera sección del 35º Rally de La Oliva. Los majoreros, a pesar de lidiar con las labores de limpieza de carretera, empiezan el fin de semana con una declaración de intenciones que les establece como sólidos líderes de la clasificación general. Tras la celebración de diecinueve kilómetros cronometrados, su colchón sobre Juan Carlos Quintana y Jonathan Hernández se pasa de los veinte segundos.

La prueba organizada por los clubes unidos de la isla de Fuerteventura arrancó con el polvo como uno de sus protagonistas. El intervalo de salida de un minuto entre cada coche causó estragos en la inmensa mayoría de equipos… menos en el compuesto por los Pérez. Algo de positivo tuvo para ellos el hecho de abrir pista. Pero ese gap creció a los dos minutos en el TC2. Y ese cambio no alteró el dominio de los majoreros, que siguieron a un ritmo infernal.

Los habituales de la Copa de España de Rallies de Tierra están obligados a reaccionar ante el empuje de sus predecesores. No se les presenta una tarea sencilla. Primero, por la forma en la que están Borja y Rubén. Segundo, porque ambos equipos compiten sobre mecánicas idénticas, sus respectivos Škoda Fabia R5. A espaldas de ellos, la zona de pódium la cierran Dani Guerra y Gabriel Espino, consistentes con su Subaru Impreza y a solo 11.9″ de la plata.

Gustavo Sosa, acompañado en esta ocasión por Miriam Antelo, figura en la cuarta posición con su Škoda Fabia Rally2 Evo. El de Puerto del Rosario está enzarzado en una batalla casi a la décima contra Iriome Perdomo y Francisco Cabrera, tripulantes de un Subaru Impreza. El apartado reservado a los 2 Ruedas Motrices lo encabezan Arisay Santana y Delia Fránquiz, que ocupan el sexto puesto de la tabla absoluta a los mandos de su Volkswagen Golf II GTI.

En el capítulo de abandonos, se produjo el de unos candidatos a la zona de privilegio, Aníbal Hernández y Daniel Hernández. Los del Mitsubishi Lancer Evo IX hicieron un recto en el TC1 y dañaron los bajos de su artefacto. A pesar de perder todas sus opciones para conseguir un buen resultado, trabajan para reengancharse a la carrera. El camino de la retirada también lo tomaron Antonio Calderín y Juan Santana cuando marchaban líderes de la Agrupación B.

Foto: Óscar Quintana