El del Honda Civic Type R concluyó la 21ª Subida a La Pasadilla en la segunda posición del apartado de turismos. Nunca antes había finalizado en un puesto como ese. El de la isla de Gran Canaria desvela que, mientras preparaba su participación en la prueba del municipio de Ingenio, tuvo que hacer frente a una avería que apareció a «última hora».
David González subió al segundo peldaño del podio en la 21ª Subida a La Pasadilla. Sobre el Honda Civic Type R, el grancanario abrochó en «la prueba de casa» el mejor resultado de su trayectoria deportiva. El único que le superó fue Iván Armas con un Porsche 911. El hombre de DGJ Sport Team terminó «más que contento». Y no solo por su actuación. También por la del resto de integrantes del equipo Reparautos Carrizal, que acabaron todos en el top cinco.
Para llevarse la medalla de plata en el evento organizado por Club Deportivo Motor Primera Etapa, González tuvo que hacer frente a un problema de última hora. Mientras avanzaba con los preparativos para afrontar el fin de semana con las mayores garantías, se topó ante una rotura que debió resolver a la carrera. David relata que tuvo que «sustituir la caja secuencial que habíamos montado porque se había roto». Salvó el susto. Su participación siguió en pie.
La caja de cambios que usó como reemplazo, sin embargo, no funcionó a la perfección. «Se nos saltaba una de las velocidades», comenta González. Pero ese nuevo contratiempo no le apartó de la pelea por un sitio en el cuadro de honor. Al término de la primera manga oficial marchaba en la tercera plaza, 2.04″ por detrás de su compañero Alby Martel. En la segunda escaló a la P2 que ocupaba el piloto del Porsche 991 GT3 Cup. Le ganó la partida por 1.97″.
«A fin de cuentas, un segundo puesto no deja de ser un resultado», dice David. El del Honda asegura que se conforma «con participar y terminar, con que todo salga bien». Por otro lado, González concede a Martel, su jefe de filas, una gran parte del «mérito» de su actuación en la escalada de Ingenio: «Sin su apoyo sería inviable que estuviera presente en la subida. Él me ha cedido las instalaciones del taller en sábado y domingo para poder acabar el coche».


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