• El tinerfeño lleva dos meses entrenando con una nueva metodología que, tras completar el 32º Rallye Villa de Granadilla, define como «un éxito rotundo».
• «Al terminar la prueba debería haber estado un poco cansado, tengo una edad, pero se me hizo corto el sábado. Estoy muy bien física y psicológicamente».

La Real Academia Española define la palabra ‘sofrología’ como la «práctica clínica que utiliza técnicas de relajación inspiradas en la hipnosis y en doctrinas orientales, como el yoga o el zen, con el fin de lograr el equilibrio psicosomático del sujeto». Esta actividad aplicada al ámbito deportivo puede ayudar, según el Instituto Internacional de Sofrología, a «gestionar pensamientos y emociones» e impacta «de manera positiva» en el bienestar y el rendimiento de la persona. Precisamente, esto último siente Manolo Mesa.

El de Los Realejos lleva dos meses abonado a la sofrología como forma de preparación para mantener el mejor estado de forma a la hora de competir. «Ha sido un éxito rotundo», afirma Mesa acerca de la implantación de esta metodología en su rutina. En el ‘Granadilla’ del pasado fin de semana comprobó los primeros resultados que esos nuevos entrenos le están reportando . «Al acabarlo debería estar un poquito cansado, tengo una edad, pero ahora mismo estoy muy bien en lo físico y en lo mental», revela.

El piloto del Suzuki Swift R4LLY S Rally2-Kit explica que acude «al gimnasio de cada día», pero junto a un amigo «experto» en la materia: «Me está echando una mano y estamos haciendo otro tipo de ejercicios, sobre todo, mentales». Sobre esas prácticas que lleva a cabo, detalla que se focalizan en el trabajo «con los ojos cerrados». El objetivo, «evitar los vértigos». También dedica tiempo al «uso de elásticos y pesas con casco puesto». «Esto me ha motivado a no desequilibrar la mente ni marear al abrir los ojos», dice.

Respecto a su tercera plaza en la ronda organizado por Escudería Atogo, Mesa comenta que «el viernes era imposible soñar con un podio por la gran calidad de coches que había», pero que puso «todo» de su lado para lograr el premio de bronce. «Este año no habíamos podido probar nada porque los dos rallies que habíamos corrido se desarrollaron con agua. En Granadilla sí me permití el lujo de hacer cambios», manifiesta. Manolo resume su fin de semana como «un espectáculo de test» en vistas al ‘Villa de Adeje’.