El piloto majorero logra su primer triunfo en trece temporadas. Con la compañía de su hijo Jonathan, comienza el Campeonato Insular de Fuerteventura de Slalom con el máximo botín de puntos en el bolsillo. La especial ubicada en su municipio de Antigua también le termina de preparar para afrontar uno de los eventos más importantes en su agenda, el 25º Rallye Isla de Los Volcanes del próximo fin de semana. Daniel Guerra y Tecorice Hernández finalizan en la segunda plaza con el Subaru Impreza STI. Javier Sosa y Javier Fragiel concluyen terceros tras haber rodado líderes durante los compases iniciales de la prueba.

Trece años después, Aníbal Hernández festeja la consecución de una victoria. La primera que comparte con su hijo Jonathan al otro lado del coche. La primera que consigue a los mandos del Mitsubishi Lancer Evo IX. La sequía del veterano piloto majorero acabó en el 1º Slalom Antigua – Punta Goma. Portando el número uno y compitiendo en una de las especiales más icónicas de su municipio, el de Fuerteventura logró un resultado que desde el verano de 2010 se le resistía. La espera, aunque larga, mereció la pena.

La naturaleza del tramo localizado a un costado de la carretera FV-50 propició que las diferencias entre los candidatos al triunfo en muy pocas ocasiones alcanzasen números excesivos. La igualdad imperante forzaba a los equipos a mantener unos niveles de concentración altísimos. En todo momento. Cualquier error te condenaría en la clasificación. Apenas dos binomios se abonaron a esa crucial regularidad. Por un lado, el de los Hernández. Por el otro, el formado por Dani Guerra y Tecorice Hernández, segundos.

El actual campeón del Campeonato de Canarias de Rallyes sobre Tierra volvió a la competición en grava tras ocho meses de inactividad. Su única aparición de la temporada se había producido en el asfalto de Betancuria. El tiempo de parón surtió su efecto en la fase inicial de la prueba inaugural del Campeonato Insular de Fuerteventura de Slalom. Luego encontró el ritmo, siguió ajeno a los problemas y aseguró la medalla de plata por delante del Mitsubishi Lancer Evo IX de los combativos Javier Sosa y Javier Fragiel.

Los hombres de Mercasosa iniciaron la jornada con un scratch, pero percances en la segunda especial les borraron del listado de candidatos al peldaño más alto del podio. Al menos, alcanzaron el tercero. Borja Pérez y Rubén Pérez, con otro Mitsubishi Lancer Evo IX, desaparecieron más pronto todavía de la lucha por las plazas de honor. Arrancaron con mal pie y terminaron cuartos. Javier Fránquiz y Jordi Díaz concluyeron con un mayor sentimiento de decepción al abandonar con su Mitsubishi Space Star Proto.

El top cinco lo cerraron Manuel Agustín García y Alain González, autores de una notable actuación a los mandos de un Volkswagen Golf GTI. Los de Club Deportivo Maxo Sport dominaron la división 2 Ruedas Motrices con una amplia contundencia. Ayocer Cabrera-Javier Lasso (Seat Ibiza Cupra), Miguel Cabrera-Mario Guillén (Volkswagen Golf GTI MK2 16V), Alberto Gil-Iván de León (Citroën AX), Cristian Santana-Delia Fránquiz (Volkswagen Golf II) y Óscar J. Montelongo-Borja de León (Volkswagen Golf) les siguieron.

Por lo que respecta a los Car-Cross, Juan Moisés Izquierdo se adjudicó la corona de laurel al volante de su MV Racing SP2. Daniel Pérez acumuló tres mejores registros de cuatro posibles con otro monoplaza idéntico. Cuando parecía el destinado a inscribir su nombre en el palmarés de la prueba organizada conjuntamente por Club Deportivo Tibiabín, Club Deportivo Betán, Club Deportivo Fuertemotor y Club Deportivo Adael, le cayó una losa de treinta segundos. Bajó a P3 y ahí finalizó, detrás de Rubén de León.